¡"Si amas al buen Jesús!"
de corazón con ternura,
vivirás siempre en la "luz"
y no verás sombra oscura.

miércoles, 26 de diciembre de 2012

Pan y vino en memoria de una vez traido y eternamente valedero sacrificio de Jesucristo.


La Santa Cena -1º Parte
        La Santa Cena tiene un significado especial para nuestra fe.
¿Por qué? La respuesta la brindan los trabajos previos sobre el Catecismo, el libro de enseñanza de la fe nuevoapostólica que será publicado el año próximo. La columna "Creer-saber-entender" lo contemplará con detenimiento en los artículos.




   En múltiples aspectos, la Santa Cena tiene un significado central: su festejo es la parte esencial del Servicio Divino. Es el único Sacramento que nos es dispensado reiteradamente. Y en la Santa Cena, Dios nos permite vivir en forma directa su cercanía y dedicación.
Se utilizan diferentes términos para designar a la Santa Cena. También en ellos se observa la riqueza de su significado: "Santa Cena" recuerda la comunión de los Apóstoles con Jesús en la noche previa a su crucifixión. "Partimiento del pan" se refiere a la cena ritual de Pascua que Él celebró con ellos. "Eucaristía" destaca el agradecimiento por el sacrificio de Cristo. Este término proviene del griego y significa dar gracias. "Cena del Señor" deja en claro que el Señor Jesús mismo instituyo el Sacramento.
           Paralelismo con la cena de pascua
 Jesús instituyó la Santa Cena mientras celebraba con sus discípulos la cena pascual. Las semejanzas entre el festejo de ambas cenas son evidentes. En ambas, pan y vino cumplen un papel importante. Y las dos traen a la memoria la proeza divina de redención.
  En la cena de Pascua se recuerda la liberación del pueblo de Israel de la cautividad egipcia. La Santa Cena refiere a la liberación de toda la humanidad de la servidumbre del pecado. La sangre del cordero de Pascua con la que fueron pintados los postes de las puertas salvó a los israelitas primogénitos de la muerte física. La sangre del "Cordero de Dios", el sacrificio de Jesucristo, salva a los hombres de la muerte eterna.
           Referencias bíblicas
  En el Antiguo y el Nuevo Testamento se encuentran hechos que pueden ser entendidos como referencias a la Santa Cena: así Abraham recibe pan y vino del rey y sacerdote Melquisedec (comparar con Gn 14:18-20), lo cual en la epístola a los Hebreos es interpretado como una referencia a Jesucristo (comparar con He. 5:10).
  El maná en la peregrinación por el desierto es llamado el "pan del cielo" (comparar con Éx. 16:4). Jesús se llama a si mismo el "pan de vida"(comparar con Jn.6:35):
   También se hace referencia a la Santa Cena cuando Jesús come y bebe, es decir, cuando está en comunión en una cena, con los pecadores, los cuales para los fariseos y escribas eran considerados impuros (comparar con Mr. ":13-17).
          La institución del Sacramento
   La Santa Cena fue instituida por Jesucristo en el círculo de sus Apóstoles. Los Evangelios de Mateo, Marcos y Lucas informan sobre este acontecimiento en gran parte lo mismo: "Y mientras comían, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo. Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos; porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados" (Mt. 26:26-28).
  El Evangelio de Lucas completa las palabras de institución en algunos puntos importantes (comparar con Lc. 22:19-20). Es el nuevo pacto" el que fue establecido por la sangre de Jesús. Y contiene la exhortación: "Haced esto en memoria de mí". De esta manera Cristo concede a sus Apóstoles la autoridad para celebrar la Santa Cena conforme a su ejemplo.

        El modelo de Corinto
  Ya los primeros cristianos celebraban la Santa Cena de esta manera. La primera epístola a los Corintios informa al respecto. Allí el Apóstol Pablo cita el texto de la institución así como seguramente se utilizaba en los Servicios Divinos locales. También formaba parte de este texto el retorno de Jesucristo: "Así, pues,todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga" (Co.11:26).
  El Sacramento de la Santa Cena es necesario para alcanzar la salvación. Esto lo dejó en claro Jesucristo mismo: "Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros", dijo ya mucho antes de la institución. "El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna" (Jn. 6:53-54).
  ¿Pero que pasa realmente durante la Santa Cena? ¿Y por qué es tan importante para nuestra vida de fe? De esto, se ocupará el próximo artículo de "Creer-saber-entender".


1 comentario:

Ricardo Miñana dijo...

Muy bonita la entrada paisana,
que pases unas felices fiestas y el
nuevo año que llega te llene de
felicidad.
¡¡Feliz 2013!!
un abrazo.