Amados niños:

     Estoy seguro de que todos ustedes sabrán cuándo es su cumpleaños.
Ese es el día en que comenzó vuestra vida. Una vida que les ha dado Dios.
Tal vez vuestra madre tuvo que esperar un largo tiempo para que nazcan.

     Quizás llegaron al mundo tan rápidamente que vuestros padres casi ni tuvieron
tiempo de llegar al hospital. ¡Pregúnteles a vuestros padres sobre vuestro nacimiento! estoy seguro de que estarán felices de contárselos.
    Mientras estén hablando con ellos no se olviden de agradecerles por el cuidado que les brindan.


El Obispo Zbinden activa con los Apóstoles Philipp Burren y Heinz Lang.
Vive en suiza y atiende a 1.186 niños en 90 comunidades en Basilea, Berna Norte,
Berna Sur, Lucerna, Thun, Zofingen y los distritos del oeste en Zürich.
Suiza no sólo es famosa por su industria relojera sino también,
por la calidad de su chocolate.
El museo de chocolate más grande de Europa se encuentra
 en Casiano, cerca de Lugano, en el Cantón del Tesino.



     Este amor hacia ustedes es tan grande que hasta hicieron posible que "nazcan de nuevo", el renacimiento. Esto es algo que es necesario si queremos entrar en el reino de Dios. ¿saben que significa el renacimiento?

Jesús contestó esta pregunta un día cuando estaba hablándole a Nicodemo.

     Este hombre le había preguntado cómo era posible. Después de todo, no es posible regresar al vientre de la madre y volver a nacer. Pero eso no es lo que se quiere dar a entender aquí. El renacimiento consiste en el Bautismo con agua y en el Santo Sellamiento con el Espíritu Santo. A través de estos dos Sacramentos, Dios nos da una vida nueva. Y esta vida está destinada al reino de Dios.

     En todo lugar donde reina el amor de Cristo, el reino de Dios ya hoy está presente: en nosotros, en nuestra comunidad. Jesús es el rey de este reino. El reino de Dios, sin embargo, un día se tornará mucho más grande. Es decir, cuando regrese Jesús y establezca su reino aquí sobre la tierra. Entonces ya no habrá más guerra, ni enfermedad, dolor, preocupaciones o muerte. Es por eso que en cada Servicio Divino rogamos en el Padre Nuestro: "¡Venga tu reino!".

      Espero este momento cada día y aguardo con ansias vivirlo junto a ustedes.

                                         Vuestro Jürg Zbinden.