¿Qué son los salmos?
Los salmos son cánticos y oraciones dispuestos en forma de poesía, con versos de cierta métrica. Son cantados o recitados por solistas y también por la comunidad. Con la palabra "salmo" se identifica el cántico individual; " el salterio" es el libro que reune los salmos.
En la tradición judía, la colección de 150 salmos sellamaba el "Libro de los Cantos". En la traducción griega, es decir la Septuaginta, se los llamaba "el libro de los Salmos" o
"Psalterion", o "psalmos". El concepto de Psalterion. (psalterium) puede referirse a una recopilación de cánticos o a un instrumento de cuerdas que acompaña a los cantores de salmos.
La historia de los Salmos
Los salmos probablemente hayan surgido en la época que se extiende entre la salida de los israelitas de Egipto hasta mucho después del exilio en Babilonia.
Por consiguiente, comprenden un periodo de aproximadamente mil años. Apenas de unos pocos salmos se puede afirmar con precisión cuándo surgieron.
Además de los 150 salmos del salterio, existen otros en el Antiguo Testamento, así por ejemplo los cánticos de Moisés (comparar con Deuteronomio 32: 1-43), de María (comparar con Jueces 5). En el Nuevo Testamento también encontramos salmos: el canto de alabanza de María (comparar con Lucas 1:46-55) o el canto de alabanza de Zacarías (comparar con Lucas 1:68-79).
Además también encontramos los salmos poéticos compuestos fuera de la Biblia. forman parte de ellos, los salmos que se le adjudican al ey Salomón. En estos poemas se expresa la esperanza de que el Mesías de la casa de David pronto asumirá su gobierno o soberanía.
El libro de los Salmos después de los cinco libros de Moisés (= Torá) y de los profetas forma parte de la tercera y más reciente parte del canon judío, es decir "los escritos". Se supone que la recopilación de 150 salmos ya había sido concluida en el siglo II a. de C.
En la época de Jesús, los Salmos gozaban de gran reconocimiento y formaban parte igual que la Torá y los profetas, de los escritos santos y obligatorios para la fe. Por cierto, este era el caso principalmente entre los fariseos y en la comunidad Qumran, mientras que para los samaritanos y los saduceos sólo la Torá poseía valor canónico.
![]() |
Estructura y autores del Salterio |
(1-41; 42-72; 73-89; 90-106 y 107-150). Cada uno de estos libros finaliza con una alabanza especial a Dios. Los salmos 3-41 son adjudicados a David, mientras que los salmos 42-49 llevan la indicación "a los hijos de Coré". Los salmos 51-65 y 68-70 se vuelven a adjudicar al rey David; las composiciones 72 y 127 se vinculan al nombre de Salomón y los salmos 50,73-83 al nombre de Asaf.
El rey David es considerado el salmista más famoso porque compuso un gran número de salmos. Coré y Asaf eran patriarcas de ciertas familias, cuyos descendientes formaban un conjunto de cantores del templo (comparar con I Crónicas 25; 2 Crónicas 20:19). Que se mencionen sus nombres, probablemente significa que los salmos respectivos pertenecían al repertorio tradicional de estos grupos de cantores.
Como por lo general, los salmos se cantaban, es igual encontrar en sus títulos indicaciones de ejecución, tales como "cántico" o "al músico principal". Es probable que estas instrucciones se dirigieran a un "maestro de música", que trabajaba en el templo y que cumplía ciertas tareas tareas en los Servicios Divinos.
en algunos salmos (comparar por ejemplo con 3:2). encontraremos la palabra "Selah", cuyo significado hasta la fecha no pudo ser aclarado unívocamente. Algunos expertos del Antiguo testamento suponen que se trata de una indicación para la comunidad en cuanto a responder al cántico de los cantores. Otros interpretan "Selah" como un simple signo de pausa.
Particularidades del lenguaje poético
El lenguaje poético de los salmos posee ciertas características. La característica de estilo más llamativa es que para destacar su importancia, un mensaje se repite en otras palabras:
"Porque se han acabado los fieles de entre los hijos de los hombres" (Salmo 12:1), o:
"No te impacientes a causa de los malignos, ni tengas envidia de los que hacen iniquidad" (Salmo 37:1).
Otra particularidad lingüística más es la confrontación de dos expresiones contrarias: "Mas el justo tiene misericordia, y da " (Salmo 37:21), o "Porque Jehová conoce el camino de los justos; mas la senda de los malos perecerá" (Salmo 1:6).
Diferentes géneros
La recopilación de salmos comprende de cánticos de alabanza, de agradecimiento, de sufrimiento y otros géneros más, cada uno con una estructura y carácter especiales.
Un grupo de salmos tiene forma de himnos, de cánticos de gloria o de alabanza (comparar con Salmos 33; 65; 100; 103; 117; 134; 135; !45; !49). El cántico de alabanza o el himno consiste en tres partes; introducción, cuerpo principal y el cierre. En la introducción, la comunidad es exhortada en conjunto a alabar a Dios. A modo de ejemplo podemos citar el texto del Salmo 135: 1-2 que dice:
![]() |
"Alabad el nombre de Jehová, alabadle, siervos de Jehová; los que estáis en la casa de Jehová, en los atrios de la casa de nuestro Dios". |
Porque yo sé que Jehová es grande,
y el Señor nuestro, mayor que todos los dioses.
Todo lo que quiso Jehová, ha hecho
en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos;
Él hace subir las nubes del cabo de la tierra,
El hizo los relámpagos para la lluvia,
El saca los vientos de sus tesoros;
Él es el que hirió los primogénitos de Egipto,
desde el hombre hasta la bestia.
Envió señales y prodigios en medio de ti,
oh Egipto,
Sobre faraón, y sobre todos sus siervos".
Como es habitual en este género, también aquí en el salmo 135, el tema de la introducción se retoma en el cierre (versículos 19-21):
"Casa de Israel, bendecid a Jehová:
Casa de Aarón, bendecid a Jehová:
casa de Leví, bendecid a Jehová:
Los que teméis a jehová, bendecid a Jehová:
Bendito de Sión Jehová,
que mora en Jerusalén.
Aleluya."
Además de himnos o cánticos de alabanza, encontramos cánticos de sufrimiento o lamentación del pueblo. En tiempos de penurias, de catástrofes naturales o al ser atacados por enemigos se los entonaba en el lugar santo. Ejemplos de ello son los salmos 44, 60, 74, 80, 83, 85. En el salmo 60: 1, el pueblo clama: "Oh Dios, tú nos has desechado, nos disipaste; te has airado: vuélvete a nosotros."
Los cánticos de sufrimiento del pueblo poseen la siguiente estructura: evocación de Dios, expresión de la lamentación o sufrimiento, el ruego y la promesa. Pero no sólo existen cánticos de sufrimiento en los que se expresa el temor y la opresión del pueblo, sino también aquellos en los que el individuo se lamenta por su desdicha personal. Estos cánticos de sufrimiento (en realidad se trata de ruegos) constituyen el género más numeroso del salterio; su organización formal se asemeja a la de los cánticos de sufrimiento del pueblo. Muchas veces, después del voto o promesa, todavía se agrega el agradecimiento por la salvación del estado de necesidad. Un ejemplo puntual de ello es el salmo 102, el así llamado quinto salmo de arrepentimiento, que se conoce como ("Oración del que sufre, cuando está angustiado, y delante de jehová derrama su lamento") ya da indicios de su función. Este salmo suministra las palabras para una oración con lo cual alguien acosado por las necesidades puede expresar su aflicción ante Dios:
"Jehová oye mi oración,
y venga mi clamor a ti.
No escondas de mí tu rostro:
en el día de mi angustia; inclina a mí tu oído;
el día que te invocare, apresúrate a responderme".
(versículos1-2).
El pueblo o el individuo no sólo expresan sus lamentos, sino también el agradecimiento. Así hay un sin número de salmos y canciones de agradecimiento. El pueblo agradece por la salvación del peligro (comparar con Salmos 124; 129).
"Nuestra alma escapó cual ave del lazo de los cazadores: quebróse el lazo,
y escapamos nosotros. Nuestro socorro es en el nombre de jehová,
que hizo el cielo y la tierra"
(Salmo 124: 7-8).
Más que canciones de agradecimiento del pueblo, encontramos aquellos en los que habla el israelita individual. Uno de los cánticos de agradecimiento más famosos es el salmo 118:
"Alabad a Jehová, porque es bueno,
porque para siempre es su misericordia...
te alabaré
porque me has oído,
y me fuiste por salud" (versículos 1y 21).
En las canciones de Sión (comparar con salmos 46 y48), emparentados con los salmos de agradecimiento, se ensalza la gloria de la ciudad de Dios, del templo o monte de Sión:
"Grande es Jehová y digno de ser en gran manera alabado.
En la ciudad de nuestro Dios, en el monte de su santuario" (Salmo 48:1).
Los salmos de sabiduría (comparar con los salmos 1, 37, 49, 119) forman parte de los textos más recientes del salterio. En ellos encontramos pensamientos sobre Dios y su creación, similares a los que encontramos en el libro de los Proverbios, la Sabiduría de Salomón, o de Jesús Sirach. Un ejemplo de este género es el primer salmo en el cual se pondera la fidelidad a la ley:
"Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,
ni estuvo en camino de pecadores, ni en silla de escarnecedores se ha sentado,
antes en la ley de Jehová está su delicia,
y en su ley medita de día y de noche"
(Salmo 1:1).
La reflexión y el ocuparse permanentemente de la ley mosaica en los siguientes siglos se constituyen en expresión sustancial de la religiosidad judía.
El salmo 119 es un famoso ejemplo de la devoción judía por la ley; es el salmo más largo. Su estructura responde, igual que otros salmos, al alfabeto hebreo. Por eso fue llamado por Lutero el "ABC de oro". La ley, la Torá aparece con diferentes denominaciones, tales como mandamiento, palabra, camino, indicación, estatuto, orden, advertencia o testimonio. En este punto, igual que en otros salmos, la ley es entendida como un camino para recibir salvación y llegar a la comunión con Dios:
"Enséñame, oh Jehová, el camino de tus estatutos, y guardarelo hasta el fin.
Dame entendimiento, y guardaré tu ley.
Y la observaré de todo corazón"
(Salmo 119:33-34).
Los salmos reales poseen enorme importancia (comparar con Salmos 2,20,21,45), en los que el rey es glorificado como elegido y ungido. En algunos de ellos, el rey es referido como "Dios", como en el Salmo 45: 6-7.
"Tu trono, oh Dios, eterno y para siempre:
vara de justicia la vara de tu reino.
Amaste la justicia
y aborreciste la maldad:
por tanto te ungió Dios, el Dios tuyo,
con óleo de gozo sobre tus compañeros".
Con estas palabras se pretende expresar que el rey de Israel se encuentra en una relación especial con Dios. Mucho de lo que expresan estos salmos puede entenderse como indicio del futuro Mesías, es decir de Jesucristo.
![]() |
"La piedra que desecharon los edificadores, ha venido a ser cabeza de ángulo. De parte de Jehová es esto: Es maravilla en nuestros ojos. (versículos 22-23). |